"Este poema es para Valeria , mi amiga del otro lado del mar que con paciencia escucha, atenúa y calma mis incertidumbres de vez en cuando."
Cuando llega la noche,
y centrifuga en mi cabeza
una mezcla de humo y tristeza
al otro lado del mar espera Valeria
con su calma argentina
y su risa porteña.
Caracola de mar,
que recibe mis ondas de pena
las rompe contra las rocas
y en la inmensa pampa entierra
devolviéndome una marea de sol
y una nube de gaviotas morenas.
Un poema vuela los andes,
y en el cielo se disgrega
cayendo en forma de lluvia
para dar las gracias
a mi amiga,
a Valeria....